Suicido masivo

Cada vez que se celebra el Día Mundial contra el Tabaco, aplaudo lo rico que se siente ir a un restaurante, a un bar o una discoteca y no tener contacto con el asqueroso e insano olor del tabaco.
Este es un buen ejemplo de una medida legal restrictiva que favorece la salud pública. Hay evidencia en aquellos países que implementan este tipo de medidas de que la epidemia del tabaquismo ha mostrado un leve descenso. Esto está bien.
Pero, esto no quita que el tabaco termina matando a millones todos los años. Quien lo consume se suicida por envenenamiento poco a poco.
Como sociedad, teniendo claro que las adicciones son un problema de salud mental y que no es ético el doble estándar, lo que sigo sin comprender es cómo nos oponemos a la eutanasia, pero le vendemos legalmente veneno a la gente para que se mate solita y poco a poco..