El ave de las calumnias
Inspirada en un cuento infantil, la “Gallina Cloclo” es un personaje ficticio de nuestra casa.
Es la autora de cuanto "boronero" y resto de alimentos queda debajo de nuestra mesa luego de comer. Detrás de cámaras, debe confesarse que mi hija y yo nos alternamos la responsabilidad de este apetitoso caos.
¡Por aquí anduvo la Gallina Cloclo!, suele decir mi esposa con mucha frecuencia, mientras nos ordena limpiar el área de desastre.
Un día de estos, el asiento trasero del vehículo donde se sienta de mi hija estaba hasta el copete de restos de galletas, pan y otros platos del menú para niños. Era como si un kínder entero hubiera pasado por ahí con cajitas felices y demás sorpresas de piñata.
¿Quién dejó este asiento así? sonsaqué a mi hija con tomo firme mirándola a los ojos, olvidando por completo nuestro complot de calumniar a la pobre polla.
De igual manera, firme y mirándome a los ojos, levantando sus hombros respondió: ¿Quien iba a ser papito?, la gallina Cloclo!
