Adivina qué hay adentro
Recuerdo de niño cuando mi madre me retaba a adivinar lo que ella era capaz de esconder en una pequeña caja de fósforos.
Pocas veces atiné, pero mis amigos y yo reíamos a carcajada batiente cuando, como por arte de magia, mi madre revelaba los tesoros más sorprendentes que escondía en esa cajita. Botones, semillas, pastillas, monedas, un dado, un borrador, un arete, fichas de un tablero y hasta un diente.
Lo más sorprendente es lo que una casa clandestinamente puede poseer adentro. Conozco quien tiene las cenizas de su padre y otro por ahi que tuvo un parquímetro en el jardín.
Sin embargo, los más sorprendente e enigmático también me lo confesó mi madre. En Puntarenas existe una casa que esconde una bomba. Si, un artefacto militar tipo misil de unos 2 metros de longitud.. Esta colocado justo al lado de un sofá en una esquina de la sala, ubicado en una posición estratégica con el sutil propósito de acabar con cualquier intento de robo a la vivienda.
En 1941 durante la Segunda Guerra Mundial el barco italiano Fella, y otro alemán llamado Eisenach fueron incendiados y hundidos frente a las costas del Puntarenas. Los motivos parecen no estar claros, pero la historia cuenta que Inglaterra había solicitado intervenir los buques al Gobierno de Calderón Guardia por lo que sus tripulantes decidieron su hundimiento.
En cualquier caso, ¿cómo llegó este artefacto militar a esta morada puntarenense? Ojalá el secreto no sea revelado nunca. No vaya a ser que algún día seamos blanco de aquellos brillantes asesores de inteligencia militar que en Irak terminaron convenciendo a Bush de la existencia de una temible colección de armas de destrucción masiva que a la postre no pasaron de ser unos cuantos tarros de pintura.
Pocas veces atiné, pero mis amigos y yo reíamos a carcajada batiente cuando, como por arte de magia, mi madre revelaba los tesoros más sorprendentes que escondía en esa cajita. Botones, semillas, pastillas, monedas, un dado, un borrador, un arete, fichas de un tablero y hasta un diente.
Lo más sorprendente es lo que una casa clandestinamente puede poseer adentro. Conozco quien tiene las cenizas de su padre y otro por ahi que tuvo un parquímetro en el jardín.
Sin embargo, los más sorprendente e enigmático también me lo confesó mi madre. En Puntarenas existe una casa que esconde una bomba. Si, un artefacto militar tipo misil de unos 2 metros de longitud.. Esta colocado justo al lado de un sofá en una esquina de la sala, ubicado en una posición estratégica con el sutil propósito de acabar con cualquier intento de robo a la vivienda.
En 1941 durante la Segunda Guerra Mundial el barco italiano Fella, y otro alemán llamado Eisenach fueron incendiados y hundidos frente a las costas del Puntarenas. Los motivos parecen no estar claros, pero la historia cuenta que Inglaterra había solicitado intervenir los buques al Gobierno de Calderón Guardia por lo que sus tripulantes decidieron su hundimiento.
En cualquier caso, ¿cómo llegó este artefacto militar a esta morada puntarenense? Ojalá el secreto no sea revelado nunca. No vaya a ser que algún día seamos blanco de aquellos brillantes asesores de inteligencia militar que en Irak terminaron convenciendo a Bush de la existencia de una temible colección de armas de destrucción masiva que a la postre no pasaron de ser unos cuantos tarros de pintura.