El Futbol según la gravedad del delito
Así se saborea el Mundial de Futbol en una prisión. Para unos pocos inocentes y un buen puñado de deudores por pensión, cadenazos, tachón y pescozón con apiada de dientes está la televisión, con derecho a celebrar luego al montazal que tienen por cancha,
Para otros, algunos pendencieros por robo con balazo o trasgresión a la integridad de niños y mujeres, está la radio en el destierro que somete a la celda.
Y para los más peligrosos, esos que transan con alegres y entusiastas sustancias y pandilleros que coleccionan cadáveres como estampillas, solo les queda el aviso de gol que vociferan los primeros.
Así se saborea el Mundial de Futbol en una prisión. Para unos pocos inocentes y un buen puñado de deudores por pensión, cadenazos, tachón y pescozón con apiada de dientes está la televisión, con derecho a celebrar luego al montazal que tienen por cancha,
Para otros, algunos pendencieros por robo con balazo o trasgresión a la integridad de niños y mujeres, está la radio en el destierro que somete a la celda.
Y para los más peligrosos, esos que transan con alegres y entusiastas sustancias y pandilleros que coleccionan cadáveres como estampillas, solo les queda el aviso de gol que vociferan los primeros.